Comenzamos esta entrada haciendo un breve resumen de lo que es
el nivel teórico-conceptual, es un nivel meramente descriptivo en el que el
investigador se limita únicamente a describir el problema. Además pondremos un ejemplo en el que se vea
con la mayor claridad posible todos los puntos importantes.
1. Selección del tema: debemos investigar sobre el origen de
los problemas y se planteará el mismo.
2. Revisión de la literatura: delimitamos el campo donde debemos buscar.
Por un lado debemos revisar las fuentes, sabiendo lo que hay y lo que no hay
sobre el tema. Por el otro encontramos las fuentes bibliográficas, para esto
acudiremos a diversas bases de datos.
3. Formulación de hipótesis y de objetivos: se busca una relación
causa-efecto. Además debe expresarse la relación entre las variables.
Dentro de este punto es importante saber que hay dos tipos
de hipótesis: la sustantiva (en las que se expresa verbalmente lo que se espera
obtener) y la estadística (que se basa en afirmaciones de uno o más
parámetros en una población).
A continuación exponemos el ejemplo que vamos a utilizar.
Mediremos el esfuerzo de los alumnos de dos colegios
basándonos en los resultados obtenidos en exámenes de lengua extranjera. Este tema
lo hemos elegido porque hemos observado que en un mismo curso varía mucho el
nivel de enseñanza entre un colegio y otro,
de este modo, nos interesa ver los resultados de los alumnos para
detectar el problema.
Nuestra actividad se basa en una hipótesis de estadísticas
ya que nos centramos en los resultados obtenidos en un examen para medir el
esfuerzo de los alumnos. El objetivo es medir el grado de esfuerzo para ver las
diferencias que hay entre un colegio y otro en un mismo nivel, y de este modo intentar
resolver estas diferencias para que tengan un mismo nivel.
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